El centro ha arreglado (a nivel de carpinteria, cerraduras y aislamiento) las puertas del gimnasio, reforzandolas y adecuándolas para que el frío y el calor no pasen ni se cuelen por el deterioro y las rendijas que había en ellas, con lo que se ganará en todo: en ahorro de energía, en mejora para las clases de Ed. Física, en insonorización, en el uso de ese espacio tan recurrido para recreos, actividades, etc. Igualmente la puerta del fondo de la Capilla también ha sido aislada y arreglada por el mismo motivo. Un esfuerzo económico que hay que alabar y agradecer a la Comunidad y a la Congregación para el bien y bienestar de todos: alumnos, profesores y la propia Comunidad.