Que no se diga. Que nuestros peques "trabajan" duro a lo largo de la semana. No sólo los mayores son los que deben atender, trabajar y esforzarse en el aula, también nuestros más "aprecidos e infantiles" alumnos son capaces de ser competentes a su manera. Se preparan para el duro futuro. Y para muestra un botón.