Hoy os narramos una de esas rutas senderistas fáciles y llanas que uno no puede dejar de hacer si vive en Sabiñánigo. Es la Ruta circular de Rapún hacia Pardina de Ayés, pasando por Abena e Ibort y volviendo a Rapún. Ruta marcada con marcas amarilla y blanca y que en cualquier momento es agradable de hacer y es una ruta de pueblos y paisajes excelente. Podemos ver relieve geológico peculiar como las Mallatas de Rapún, carrascas, bojes, pinos, hongos, plantas medicinales, Monte Oroel por su parte Este, Cumbres del Pirineo aragonés, Santa Orosia, un pueblo multicultural y peculiar como Ibort con su iglesia-rocódromo, una casa rural ecológico-ambiental en Rapún y senderos muy bonitos entre pinos y matorrales con relieve variado de piedras y arenilla roja. Es circular y su duración aproximada con paradas es de unas 5 horas y cuarto. Ideal en familia. También podemos ver en el recorrido burros, asnos, caballos, ovejas, perros mastines, quebrantahuesos, cuervos,... En la ruta hay que tener cuidado en varios desvíos para no despistarse ya que varía entre sendero y pista forestal.
Decir que en esta ruta hoy hemos puesto un Belén montañero (ver reportaje del itinerario) en su recorrido que a lo largo de próximos meses volveremos a buscar para poner el próximo año en otro lugar. Hemos cantado algunos villancicos y un padreuestro y luego hemos comido a base de comida de alforja con embutidos, queso, pan de pueblo y turrón.
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